Objetos antiguos: una cita con la historia

MuseumInATab. En cada solapa nueva, la extensión ofrece un museo. Abarca arte, ciencia, tecnología y medicina.


La niña sostiene la respiración. Apenas esboza una sonrisa. Sin embargo, la calesita no gira y el caballito permanece estático. En tanto, su ingenioso padre apunta el cañón de rayos X. Segundos después, la placa de tórax es un éxito. La fotografía fue tomada en 1957 y desnuda una época cruzada por invenciones extravagantes.

El frasquito azul parece una pieza decorativa. Tal vez, conserva un perfume sublime. O quizás añeja el sabor de un licor exquisito. Lo cierto es que los contornos redondeados datan del siglo XIX. Irónicamente, son granadas de agua y se utilizaban para combatir incendios. De acuerdo a sus fabricantes, debían arrojarse a la base del fuego.

A simple vista, el lector desprevenido afirmaría que estamos frente a un reloj antiguo. Pero al quitar la tapa, el cuadrante de níquel anuncia los puntos cardinales. La brújula diminuta está rodeada por un termómetro circular. El artilugio cabía en la palma de una mano y enmarcaba dos instrumentos en uno.

Describimos apenas 3 curiosidades que ofrecen los Museos de Ciencias. De hecho, la colección británica alberga más de 7 millones de objetos. Sus tesoros abarcan medicina, transporte, industria, arte e indumentaria. Tan sólo hará falta instalar una extensión¿Se animan a descubrirlos?

Carlos Balmaceda

Editor de contenidos | Analista de Sistemas (Univ. Arg. J.F.K.)

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